¿Quién cree en el amor a primera vista?

Buenos días de lunes… ¿Que si me he vuelto loco? Quizá. El pasado sábado me crucé con el chico más impresionante que he visto en mi vida… ¿Esto significa que le estoy siendo infiel a Kike? No! Bueno, sólo de pensamiento…

Todo empezó en la sección de muebles de cocina de aquellos grandes almacenes que llevo nombrando en los últimos posts. Yo me encontraba echando un vistazo a las diferentes posibilidades de disposición de los armarios dentro de este espacio cuando de repente alguien se acercó para decirme: “¿Te puedo ayudar en algo?”. Lo primero que me sorprendió fue el hecho de que el personal tomara la iniciativa cuando normalmente es el cliente el que tiene que ir a preguntar. Lo segundo (y no menos importante) fue esa mirada azul y ese pelo perfectamente engominado, como si procediera de la misma Suecia. Su aire nórdico era indiscutible. Me impactó. A continuación, mi respuesta, perfectamente impensada: “Claro, tenía dudas con la combinación y disposición de los colores de la cocina, ¿qué me aconsejas?”. A partir de ahí, una interesante charla acerca de nuestros respectivos gustos sobre decoración nos absorbió el tiempo…

Todavía me le acabo llevando a Salou conmigo en vez de a Kike...que no tonto!!!