Comprar o no comprar

Son muchas las noticias que se están dando ahora refiriéndose al buen momento en el que nos encontramos para adquirir una vivienda. Personalmente, no me arrepiento de haber comprado en Aurea Park y tampoco del momento en que lo hice. Oportunidades como ésa suele haber pocas, así que desde aquí animo a todo aquel que desee y pueda a lanzarse de cabeza en la compra de la casa de sus sueños. Porque independientemente de lo que nos rodee, cada uno tiene su momento.

Así que piénsalo y pregúntate a ti mismo: “¿Es ahora mi momento?”. Si la respuesta es afirmativa, no esperes más ;)

¿Algún intrépido que se atreva a contar su experiencia?

Gays que se comprometen con causas sociales

¿Los gays pueden comprometerse con las causas sociales? Muchos os preguntaréis a qué viene esta pregunta. Lo cierto es que nunca me he parado a pensar en ello y estos últimos días un acontecimiento ocurrido me ha traído de nuevo hasta aquí. No me voy a parar en los detalles, simplemente quiero lanzar a la blogosfera la siguiente cuestión:

Si algunos sectores de la sociedad no se comprometen con nuestro gremio, ¿cómo se ve desde fuera que un gay actúe a favor de ciertas causas sociales? Por ejemplo, se me ocurre, que se manifieste contra el aborto.

Siento ponerme a veces tan transcendental, pero me interesa vuestra opinión ;)

Ricky Martin sale del armario

La noticia es de ayer, pero hoy salgo de mi armario para comentarla. La verdad es que no pilla a nadie desprevenido. Todos lo sabíamos ya, ¿no?

"Acepto mi homosexualidad como un gran regalo". Sinceramente, el tema puede llevar debate. ¿Quién somos para juzgar a nadie por su condición sexual? ¿Acaso eso repercute en el trabajo? ¿Ricky Martin canta peor por ser como es?

¿Y si tu dentista fuera gay? ¿Te cambiarías de consulta?
Espero que este ejemplo y muchos más valgan para quitar el miedo a partir de ahora al "qué dirán" de muchas personas que aún viven escondidas...

Que tengáis buen puente de Semana Santa!!

Salou: lugar de vacaciones…

Todos sabemos que Salou tiene muy buena fama como sitio turístico, aunque yo me haya decidido por tenerlo como lugar de residencia habitual. Lo que nunca me imaginé es la noticia que acabo de leer en El País: “5.000 universitarios británicos toman Salou en busca de alcohol barato y sexo fácil”. ¿Pero esto qué es?

Necesito desahogarme de alguna manera. Supongo que se trata de algo pasajero y que, dada la polémica, no tardará mucho en disuadirse el asunto… ¿Vosotros qué creéis? ¿Podré disfrutar de la paz y la armonía en la maravillosa costa mediterránea?

“Soy gay”

“Me gustan los hombres”. Mi madre se acercó lentamente hacia el salón. Mi padre levantó la vista del periódico. “Qué susto me has dado, hijo, pensé que ibas a contarnos una desgracia” – dijo mi madre – “Nosotros te apoyamos”. Y entonces una sensación general de alivio invadió todo mi cuerpo.
“¿Tú estás seguro de lo que dices, hijo?” – inquirió mi padre. “Totalmente” – respondí yo.
Mi padre se levantó de la butaca sin mediar palabra, cambió sus zapatillas de andar por casa por unos zapatos, se dirigió a la puerta y se fue. Yo hice amago de ir tras él, pero mi madre me detuvo: “Déjale, ya volverá”.

Una vida normal

Desde pequeño siempre pensé que tendría una vida lo que comúnmente se denomina “normal”: una familia, mascota, casa, coche, trabajo… Vamos, lo típico. Pero siendo uno ya adulto y viendo lo que me han brindado las circunstancias no puedo más que decir que este mundo es impredecible. Ni siquiera mis padres se imaginaron que su hijo fuera a ser gay. Recuerdo el día que se lo dije, mi padre estaba sentado en su butaca preferida y mi madre se servía un café desde la mesa de la cocina. Era una tarde de domingo lluviosa. Yo había salido la noche anterior (tenía 18 años) y precisamente llevaba varias semanas quedando con un chico. No es que él me convenciera de ello, yo ya sabía que tarde o temprano tenían que saberlo. Así que me armé de valor, tragué saliva y dije: “Papá, mamá, tengo que deciros algo”.

Pensante

Siento no haber dado señales de vida durante todo el mes pasado, pero he estado muy liado de trabajo estas semanas. El proyecto de Aurea Park sigue en pie. Sin embargo, la relación con Kike cada día se desestabiliza un poco más. Ya no sé qué hacer. Hasta me replanteo el vivir solo. ¿Por qué no? ¿Alguna sugerencia desde la blogosfera?